Con esta norma los gobiernos de turno no podrán tener pretextos algunos, para no dar agua y el alcantarillado, que son básicos para la vida, El estado tiene la obligación de garantizar la prestación del servicio. Debe ser la comunidad entera quien se haga cargo del costo de los que no puedan pagarlo. En el caso del servicio público de agua corriente, el Estado debería asegurar una cantidad mínima gratuita y cobrar sólo a quienes consuman por encima de ella.
Por supuesto, no deberíamos cometer la ingenuidad de creer que una declaración es suficiente para terminar con la injusticia, de la falta de agua en los pueblos más alejados, estamos hablando de las comunidades campesinas y nativas, ellos ahora ven afectados su medio ambiente, con las mineras, fabricas, como cementos lima, etc.
En nuestro país, es hora de reclamar este derecho, que sea incluido en la nueva ley de agua, que poco o nada se conoce, es mas con la opulencia de tanto dinero que se tiene, las prioridades son otras, las cifras que vemos por las propagandas son distintas a la realidad.
En el Perú el 76% de la población vive en urbano, y el 24 % vive en rural, y cada año 180 mil llegan de provincias a poblar lima, a sus asentamientos humanos, dejando sus tierras, esto significa que dentro de 15 años lima tendrá, unos 16 millones de habitantes, con la cual se acrecentara el estrés hídrico ya en camino, no tienen el servicio del alcantarillado, que provoca enfermedades diarreicas, por consumir agua de cilindros o carros cisternas.
La organización nacional peruanos sin agua, relanzo su proyecto piloto de atrapanieblas, esta es una forma de tener agua, en casa que satisfaga, las necesidades básicas, además sirve para tener todo tipo de plantas en casa.
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